Manuel Sans Segarra ---- * https://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Sans_Segarra * Empezó a investigar las experiencias cercanas a la muerte (ECM)[12]​ tras acontecer una experiencia de uno de sus pacientes que había conseguido ser recuperado tras estar en el estado de muerte clínica, mientras ejercía una guardia en el servicio de urgencias.[13]​ * Después de ese suceso, ha llegado a documentar cinco casos clínicos de pacientes en colaboración con su equipo médico del hospital barcelonés.[14]​[15]​ En el transcurso de sus investigaciones,[16]​ ha estudiado las obras de expertos en la materia y se ha reunido con físicos y diversos profesionales de especialidades médicas,[17]​ a los que expuso las vivencias de estos pacientes que repentinamente volvían a la vida.[18]​ * Sans Segarra considera que el paradigma de la mecánica cuántica de la física teórica aplicado al ser humano presenta un gran paralelismo con los fenómenos que comentan los pacientes en las ECM. Según sus hipótesis, existiría una conciencia que tiene continuidad fuera del cerebro y que persiste después de la muerte física: la denomina conciencia no local o «supraconciencia».[19]​[20]​ Esta conciencia podría explicar los experimentos a los que fueron sometidas las personas que han vivido una ECM por Segarra, como presentarles un objeto exclusivo durante la muerte clínica y, posteriormente, detectarse actividad cerebral en el lóbulo occipital, ante la exposición del objeto particular tras la recuperación del paciente en pruebas de neuroimagen.[21]​[22]​ * Es coautor del libro La supraconciencia existe. Vida después de la vida. Editorial Planeta. 2024 * CRITICAS * Desde una parte del propio ámbito cientifíco, el autor ha sido puesto de ejemplo de cómo disciplinas ajenas a la física se han apropiado de la terminología de la mecánica cuántica, especulando desde dicho vocabulario, abusando del lenguaje, y dando por verdades científicas sus propias conclusiones. Se trataría en definitiva de un misticismo cuántico que distorsionando la mecánica cuántica la transformaría en muchos casos en la base de un manual de autoayuda. Este grupo del ámbito científico incide en que son afirmaciones desprovistas de todo rigor científico.