Ciudadania Senior
- La llamada revolución de la longevidad aumentará el número de personas mayores en el mundo. Así las cosas, son muchas las asociaciones e instituciones que luchan para crear una sociedad más inclusiva con los ancianos. Anteriormente, hablábamos de mayorescencia; en este caso, iremos un poco más allá, presentando un nuevo acuerdo que podría ser beneficioso para el mundo de la tercera edad: el Acuerdo Europeo para la Ciudadanía Senior. ¿Buscas un servicio profesional de cuidado de ancianos?
- Del reconocimiento de la mayorescencia a proyectos consistentes- La mayorescencia es un término nuevo que los sociólogos y otros especialistas han empezado a utilizar para dar nombre a una nueva realidad que se quiere visibilizar: esa etapa de la vida en la que las personas mayores no tienen por qué sentirse viejas ni comportarse como tal. En efecto, como todo, ser “viejo” es una convención social que afecta a muchas personas, sufriendo una evidente discriminación por parte de la sociedad. Si anteriormente hablábamos de las mejoras necesarias a nivel social, ¿cómo podría llevarse a cabo la lucha contra el edadismo desde la política?
- El Acuerdo Europeo para la Ciudadanía Sénior, dividido en 4 enfoques
- El sociólogo Santiago Cambero habla sobre el Acuerdo Europeo para la Ciudadanía Sénior. Según el especialista en sociología y gerontología social, este acuerdo podría construirse sobre 4 pilares fundamentales.
- En primer lugar, se habla sobre la estima como aspecto fundamental hacia el respeto absoluto por las personas mayores, con el fin de acabar con el edadismo, discriminación que se sitúa en tercera posición en Europa, tras el racismo y el sexismo.
- En segundo lugar, la educación debe ser accesible en todas las etapas de la vida, también en la tercera edad, eliminando la creencia de que “a estas alturas” no merece la pena seguir aprendiendo.
- En tercer lugar, la empleabilidad se enfocaría en su carácter más social, no tanto económico, valorando los trabajos, sobre todo de cuidados, invisibilizados durante años y considerados obligatorios para ciertas personas mayores, especialmente mujeres.
- Por último, en cuarto lugar, se deberá prestar atención al entorno del anciano, haciendo de los lugares privados y públicos entornos accesibles para todos, sin barreras arquitectónicas que puedan causar peligros constantes en su día a día, como ha venido ocurriendo hasta ahora.