Tita Merello
PRECURSORA DE LA VALORACIÓN DE LA MUJER, DE PONER EN PANTALLA MUJERES REALES, FUERTES Y CORAJUDAS. Y DE UNA HONESTIDAD BRUTAL AL RECONOCER SU VULNERABILIDAD Tita Merello: " Tengo fama de mujer brava, valiente, leona pero soy una mujer llena de miedos" una de las mujeres más importantes del avance femenino en el mundo del espectáculo. Con su característico vozarrón tanguero y su tono imperante, Tita Merello fue la cara visible y promotora de una campaña nacional contra el cáncer de cuello de útero en su programa de radio, con la clásica frase: “Muchacha, ¿ya te hiciste el Pap?”,
- 1904. Nace Tita Merello- Nace una de las mayores figuras del espectáculo argentino: Tita Merello. Fue actriz y cantante, y en su vejez participó de ciclos televisivos. Destacó en ¡Tango!, la primera película sonora argentina, estrenada en 1933, en Arrabalera, Los isleros y Mercado de Abasto, entre otros títulos. En 1990 fue nombrada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires. Recluida en la Fundación Favaloro, murió allí el día de Nochebuena de 2002, a los 98 años
- Tita Merello: " Tengo fama de mujer brava, valiente, leona pero soy una mujer llena de miedos" Un 11 de octubre de 1904, en un conventillo de San Telmo, nació Laura Ana Merello, la querida actriz y cantante Tita Merello quien dejó su huella en la vida como artista pero, sobre todo, como mujer. La actriz argentina Mercedes Funes, protagonista del film "Yo soy así: Tita, la película", la recuerda como “una precursora del empoderamiento femenino”.
- Hija del chofer argentino Santiago Merello, que falleció a causa de tuberculosis y de la planchadora uruguaya Ana Gianelli. A los cinco años fue trasladada a un orfanato porque su madre no podía cuidarla. Luego de vivir en varios lugares y trabajar como criada, volvió al conventillo a los 12 años. Jamás pudo concurrir a la escuela, recibió educación formal de parte de Simón Irigoyen Iriondo. La soledad, la pobreza y el abandono emocional marcaron su personalidad.
- La actriz Mercedes Funes, de importante trayectoria en televisión, teatro y cine, protagonizó el film argentino, dirigido por Teresa Costantini, Yo soy así: Tita la película, en la que encarnó a Tita Merello. Hablamos con ella sobre que significó este rol en su vida y en su carrera, que destaca de la personalidad de Tita y cual es el legado que dejó la recordada actriz y cantante.
- ¿Qué te conmueve la personalidad y de la historia de Tita Merello?
- -De la personalidad de Tita me conmueve todo. Llegué a amarla profundamente, a conocerla, creo, profundamente también. Cuando un actor se acerca a un personaje trata de entenderlo y de conocerlo en todas sus aristas y de tener una empatía total. Es como que te transformas casi en el mejor amigo de ese personaje, es como un familiar, como alguien muy cercano. En eso se transformó Tita para mí. Lo que más me resulta admirable, y siempre me resultó admirable de esa mujer, es ese carácter único, inimitable, por más de que muchos quisieran imitarla, nadie ha podido. Todos han hecho una imitación burda de su persona, porque era tan fuerte, impregnaba una imagen tan fuerte que quedaba en la retina de todas las personas. Cualquiera que conociera a Tita sabía que se destacaba del resto en cualquier ámbito.
- Esa manera tan particular de decir lo que pensaba, esa irreverencia que siempre tuvo, y que la caracterizó tanto, y esa masculinidad femenina y esa femineidad masculina, tan disonante con la época, en donde la mujer tenía que ser como mucho más suave y todo más blanco y rococó, ahí apareció esta guerrera a mostrar otro tipo de femineidad, mucho más sanguínea, con mujeres más reales. Sus personajes eran mujeres reales, mujeres empoderadas.
- Fue una de las primeras grandes empoderadas del cine, los personajes que ella interpretó y los tangos que ella cantaba, las letras de sus tangos, sobre todo después en el recorrido de los años, la fueron haciendo una mujer empoderada, que hablaba por si misma, que hablaba de sus ideas, de su sentir, de lo que deseaba, una mujer deseante, eso es maravilloso. Tengamos en cuenta los años de los que estamos hablando, la época en la que, todavía, animarse a mostrarse desde ese lugar, era solo para valientes.
- ¿Qué significó para vos ponerte en su piel? - Para mi interpretar a Tita Merello significó una de las cosas más importantes, no sólo de mi carrera como actriz sino de mi vida. Formar parte de una película tan grande, tan hermosa por otra parte. La verdad el hecho de, como actriz, ponerle el cuerpo a un personaje, persona, porque es alguien que vivió y que existió, me hizo trabajar con un nivel de atención y de responsabilidad aún mayor de la que yo siempre pongo en mis personajes. Fue un aprendizaje muy grande.
- ¿Cómo te preparaste para ese rol? -Me preparé mucho. Me preparé para las audiciones, incluso, porque tuve toda una seguidilla de audiciones y callbacks, como se llaman a los distintos llamados que te que te van haciendo, una y otra vez, a modo de preselección. Me preparé muchísimo con mi coach de actuación, Fabiana Maneiro, e hicimos muchos ejercicios de aproximación al personaje. También con mis dos coach de canto, Marisol Gómez Alarcón y Maximiliano Cruz, hice un trabajo de preparación de la voz, porque la voz de Tita era muy diferente a la mía. La manera en la que ella cantaba era muy diferente a la que canto yo. Yo no soy cantante, soy una actriz que canta, entreno mi voz pero nunca me dediqué al canto. Fue un trabajo muy arduo. También de la mano de Osvaldo Montes, el realizador y director musical de la película, trabajamos mucho para tratar de encontrarle el tono, era tratar de imitarla lo máximo posible, en el mundo del canto, sin perder la originalidad propia de mi persona. La idea de la directora, Teresa Constantini, era que la actuación sea una recreación de Tita y no una imitación. Entonces poniendo un poco de mi propio material y de lo que había en mi, fuimos trabajando, de a poco, para llegar, cada vez más, a aproximarnos a Tita.
- ¿Qué legado dejó Tita en las mujeres? - Pintó un camino amarillo, bien claro, para ir recorriendo todas, hacia ese lugar de empoderamiento femenino, donde lo que importa es lo que deseas, lo que querés, como querés ser y no lo que te piden que seas como sociedad y lo que supuestamente se espera de vos como género. Una mujer que no fue madre, una mujer que, más allá de que lo haya deseado con todo su corazón y que, en algún lugar, una parte de ella quiso ser esposa madre y vivir en la casa con la cocina perfecta y el delantal de cocina, porque eso también está en el deseo de la mujer de la época. Y por qué no, también puede estar en el deseo de cualquier mujer, pero ella eligió otro camino, el del artista, el de la trabajadora y lo tránsito con mucha personalidad.
- LO QUE EN UN VARÓN SE LE DICE: "ES UN HOMBRE DE CARÁCTER" PASA A SER EN LA MUJER "UNA MUJER DE MAL CARÁCTER". Su mal carácter creo que también la ayudo. Me gusta el mal carácter a mí en las mujeres, me parece que las mujeres de “mal carácter” que son las que dicen, las que ponen un punto, las que ponen un límite, las que dicen esto si esto, esto no, esto de tal manera, esto de tal otra, las mujeres líderes, las mujeres jefes, creo que son las mujeres que inspiran a otras mujeres y me parece que eso ha sido uno de sus grandes legados.
- El debut de Tita en los escenarios - Con apenas 13 años debutó como corista en una zarzuela en el Teatro Avenida. Corría el año 1922 cuando se presentó en El Bataclán, un teatro del Bajo Flores, para luego llegar al Teatro Maipo, donde cantó su primer tango Trago Amargo. Se la nombraba como la más rea del tango, por sus preferencias por los tangos humorísticos, irónicos o sarcásticos. Conquistó al público con su condición de arrabalera, su desenvoltura, su costumbre de decir lo que pensaba y sentía.
- El tango, su forma de expresión Tita sentía que tenía que transmitir lo testimonial y contestatario, por eso algunos de sus preferidos fueron: ¡Qué vachaché!, Cambalache, Yira Yira, ¿Dónde hay un mango?, Tranquilo, viejo, tranquilo, Soy un arlequín, Los amores con la crisis,¡Qué hacés, qué hacés!, ¡Que careta!, Che, Bartolo. Algunos con tintes autobiográficos como Se dice de mi, Arrabalera, Pipistrela, Graciela oscura, La milonga y yo, Soledad, la de Barracas, entre otros.
- Elegía su repertorio, su modo de expresarlo y así creaba su estilo, entre el recitado y el canto. Descollaba el decir y el recitado musical deliberado, que remataba con gestos y repliegues inesperados en la expresión de su rostro, sin perder jamás el dominio de la dicción, ni los pasos de comedia.
- Se dice de mi, una interpretación emblemática- La milonga, con letra de Ivo Pelay y música de Francisco Canaro es representativa de una mujer aguerrida, de carácter fuerte y a la que no le interesan en absoluto las convenciones de modos sociales y físicos.
- La letra original fue pensada para que la cante un hombre, dado que el protagonista era un hombre extravagante, pícaro y que hace gala de su fealdad. La versión femenina alcanzaría un éxito impresionante al ser grabada por Tita Merello con la orquesta de Francisco Canaro el 23 de julio de 1954 e incluida en la película argentina Mercado de abasto, dirigida por Lucas Demare.
- A todos los argentinos les pido que no se olviden de mí. Gracias por creer que fui algo más de lo que soy. (Tita Merello, 1999)
Tita Merello falleció, por causas naturales, el 24 de diciembre de 2002 a los 98 años. Quedó la admiración que le daban millones de argentinos, al escucharla cantar en los escenarios o acompañandola en su paso por el cine y la televisión.