Andrew J. Scott

Andrew J. Scott's + positive longevity







What has happened to life expectancy, what is likely to happen and what constitutes the longevity imperative? What are the economic consequences of this in terms of the public finances, productivity and the labour market? What can we do to age better? And how might this change how we live our longer lives?

The Resolution Foundation is hosting an in-person and interactive webinar to mark the new launch of Andrew Scott’s new book The Longevity Imperative, and to debate and answer these questions.

The event will be open for people to physically attend, alongside being broadcast via YouTube and the Resolution Foundation website. Viewers will be able to submit questions to the panel before and during the event via Slido.

Speakers: Andrew J Scott, Author, Professor of Economics at London Business School David Willetts, President of the Resolution Foundation (Chair)




Publicado a las 16:11h in Editorial by estudiobajbujdiseno La longevidad representa una excelente oportunidad para que las sociedades transformen la manera en que piensan sobre la vida, el trabajo y el propósito. Es lo que plantea el destacado economista y profesor de la London Business School, Andrew J. Scott, en su reciente libro “The Longevity Imperative”, donde se refiere a las implicaciones económicas, sociales y políticas de vivir más tiempo.

Sabemos que en los últimos 100 años, la esperanza de vida en el mundo ha aumentado en promedio entre 2 y 3 años por cada década, lo que desafía a los mayores a una “reinvención personal”, como destaca el profesor Scott.

Tres son las ideas centrales que quisiera relevar y que en Tálanton vemos como ejes fundamentales tanto para la definición de políticas públicas y empresariales, como también a nivel individual, considerando nuestra mirada de las personas mayores como sujetos activos de derecho:

La noción tradicional de que uno elige una carrera y se aferra a ella hasta la jubilación ya no corre. ¿Estamos como sociedad impulsando a las personas a reinventarse, diversificar sus carreras y desarrollar nuevos intereses a lo largo de sus vidas? ¿Cuál es el rol de las empresas en esto? La rápida evolución de la tecnología y el mercado laboral exige que los profesionales se actualicen constantemente. Al mismo tiempo, la tecnología fomenta un entorno propicio para la reinvención al dar acceso a una amplia gama de recursos en línea que permiten a los profesionales aprender y reeducarse sin grandes barreras. ¿Estamos diseñando políticas públicas que faciliten el acceso masivo a las herramientas tecnológicas que permiten el desarrollo de habilidades y competencias necesarias para la constante reinvención personal? La reinvención requiere un cambio de mentalidad, en el que las personas deben verse a sí mismas como aprendices de por vida. ¿Estamos promoviendo en nuestras familias, colegios, universidades y lugares de trabajo una actitud flexible y abierta al cambio, cuestionando las creencias tradicionales sobre el trabajo y la carrera profesional?

Los invito a plantear estas y otras tantas preguntas en nuestros ámbitos de influencia y a abrazar con optimismo y proactividad los desafíos y grandes oportunidades que plantea el fenómeno de la longevidad.




Scott es profesor de Economía en la London Business School, cofundador del Longevity Forum (Foro de la Longevidad) y coautor de The 100-Year Life (La vida de 100 años), del que se han vendido más de un millón de ejemplares. Su último libro, The Longevity Imperative: How to Build a Healthier and More Productive Society to Support Our Longer Lives (El imperativo de la longevidad: Cómo construir una sociedad más sana y productiva para vivir más años, Basic Books, abril de 2024), esboza lo que debe suceder en los sectores público, privado y social para estimular lo que él llama una “economía evergreen” (perenne o imperecedera).

Como parte de la serie Conversaciones sobre la salud (Conversations on Health) del McKinsey Health Institute (MHI), Scott se sentó recientemente con Ellen Feehan, socia de McKinsey y colíder del equipo de longevidad saludable del MHI, para hablar sobre el significado de la longevidad saludable y por qué debería ser prioritaria, independientemente de la edad, la geografía y la industria.

La siguiente es una versión editada de su conversación.

Ellen Feehan: En su opinión, ¿qué es la longevidad saludable?

Andrew Scott: Ha sucedido algo extraordinario. La esperanza de vida mundial supera ya los 70 años. En los países de renta alta, se espera que el 50 por ciento de los niños vivan hasta finales de los 80 o principios de los 90 años. Vivimos más, pero no estamos más sanos durante más tiempo. También debemos asegurarnos de ser productivos y estar comprometidos durante más tiempo. Y eso es lo que yo considero una longevidad saludable: cómo podemos responder a esta duración extra de vida que hemos logrado para asegurarnos de que no solo vivamos más tiempo, sino que estemos más sanos, comprometidos y seamos productivos durante más tiempo.

Ellen Feehan: ¿Por qué longevidad saludable y no envejecimiento saludable?

Andrew Scott: No quiero ponerme demasiado purista, [pero] en general, tengo un problema con la palabra "envejecimiento". Creo que hemos “medicalizado” la vejez; la vemos solo como una forma de decadencia. Y sí, por supuesto que se trata de un envejecimiento saludable, pero si vamos a pensar en la longevidad, tenemos que reconocer que también se trata del tiempo extra que tenemos por delante. Ya sea que tengamos 20, 50, 70 u 80 años, tenemos más tiempo por delante que las generaciones anteriores. Así que creo que centrarse en la longevidad, en ese tiempo que tenemos a cualquier edad, es realmente importante. ¿Qué es el envejecimiento saludable? Creo que la gente lo ve como algo que ocurre: “Ah, ya lo haré más tarde”. Se puede mejorar la forma de envejecer en cualquier momento, pero cuanto antes se empiece, mejor.

Ellen Feehan: En 2050, 1,600 millones de personas tendrán más de 65 años. ¿Cuál es la oportunidad en este cambio demográfico?

Andrew Scott: Me alegro de que haya usado la palabra “oportunidad”, porque normalmente una sociedad que envejece se ve como algo malo; es como, “Dios mío, tenemos una sociedad que envejece”. Pero sin duda es una oportunidad. Y creo que hay dos formas de darle la vuelta a esto. Una, a menudo se escucha a la gente decir: “Bueno, hay una oportunidad en todas las cosas que necesitan las personas mayores”. Pero creo que en realidad hay un cambio más profundo en juego. Yo lo llamo la sociedad evergreen o la economía evergreen. Vivimos más, pero necesitamos estar sanos más tiempo. Necesitamos estar comprometidos durante más tiempo. ¿Y cuáles son las cosas que puedes hacer por mí para ayudarme a lograrlo?

Es cierto que si en el futuro me enfermo y padezco demencia, gastaré dinero para que alguien me cuide, pero me gastaré una fortuna para evitar la demencia. Y a eso me refiero con la economía evergreen. ¿Qué cosas puedo hacer a los 30, 40, 50 o 60 años para ayudarme a mantener mi salud, mi propósito, mi sentido de compromiso? Y esa es una gran oportunidad para el sector del ocio, los alimentos y las bebidas, la educación y los servicios financieros, así como, por supuesto, los productos de salud. Es una enorme oportunidad de mercado porque, en todo el mundo, todos vivimos más años y podemos esperar tener más tiempo por delante. Por eso es tan importante cómo envejecemos.

Ellen Feehan: ¿Qué papel deben desempeñar aquí los empleadores y las organizaciones?

Andrew Scott: Creo que tienen un doble papel. Uno es, por supuesto, la forma en que cuidan de sus empleados, y el otro son los productos que fabrican. Es necesario que ocurran muchos cambios ahora; tenemos que adaptarnos a estas vidas más largas. Muchos productos nuevos. Muchos servicios nuevos. Y la mayoría de las empresas, cuando hablo con ellas, piensan en los mayores de 65 años como un mercado único centrado invariablemente en cuestiones como los cuidados y el declive, subestimando de hecho la capacidad de las personas mayores. Ésa es una creencia arraigada en el concepto de una sociedad que envejece; es decir, malinterpretar fundamentalmente un enorme mercado potencial con un número cada vez mayor de personas que tienden a tener más dinero que los más jóvenes. Así que creo que hay una enorme oportunidad de producto porque estamos entrando en un profundo período de cambio social, y las empresas son el brazo de distribución del cambio social.

Los empleadores se van a dar cuenta de que cada vez más trabajadores son mayores. En los últimos diez años, en los países [de renta alta], la mayor parte del crecimiento del empleo procede de trabajadores mayores de 50 años. Las empresas tienden a centrarse mucho en los trabajadores más jóvenes: “¿Cómo los atraigo?”. Pero si no tienes cuidado, perderás mucho talento que es mayor y experimentado. Y los equipos con diversidad de edades tienden a hacer que una empresa funcione mejor. Creo que las empresas a menudo no se dan cuenta de la experiencia y el conocimiento que tienen los trabajadores de más edad. Es muy importante pensar en cómo retener ese capital humano y encontrar formas de hacerlo a través de empleos más adaptados a la edad, garantizando al mismo tiempo que la plantilla de la empresa pueda aprovechar los beneficios de la diversidad intergeneracional.

Ellen Feehan: En 2023, el MHI realizó una encuesta global a 21,000 adultos mayores sobre su percepción de la edad. Los encuestados coincidieron en gran medida en la importancia de tener un propósito y un compromiso significativo con la sociedad a medida que envejecen. A menudo nos referimos al refrán: “La edad es solo un número”. ¿Qué significa esa frase para usted?

Andrew Scott: Me encantaba esa expresión, pero cuanto más pienso en ella, más me confunde, porque la pregunta es: “¿Qué número?”. ¿Y es útil? Estamos muy enfocados en la edad cronológica. Estamos muy enfocados en cuántas velas hay en el pastel de cumpleaños.

Y esa es la base del edadismo (discriminación por razón edad): la idea de que tu edad cronológica determina tus comportamientos. Pero creo que hay otras dos definiciones de edad realmente importantes. Una se llama “edad prospectiva”: el número de años que puedes esperar vivir. A los 58 años, debería comportarme de forma diferente a mi padre y a mi abuelo a esta edad, porque tengo más años por delante. Y la otra forma realmente importante de pensar en la edad es la edad biológica: a menudo decimos “tienes buen aspecto para tu edad”, que es un reconocimiento informal del concepto de edad biológica.

Si queremos envejecer bien, realmente tenemos que asegurarnos de que nuestra edad biológica se mantenga lo más joven posible, durante más tiempo. [En cuanto a] la edad cronológica, no estoy seguro de que sea útil. A menudo es un concepto muy engañoso. Necesitamos pensar en el envejecimiento de forma muy diferente. En definitiva, tenemos que cambiar nuestra manera de envejecer para no sobrevivir a nuestra salud, nuestra riqueza, nuestras finanzas, nuestras habilidades, nuestras relaciones. Si vamos a cambiar nuestra forma de envejecer, a cualquier edad deberíamos comportarnos de forma diferente a las generaciones pasadas.

Ellen Feehan: ¿Puede hablarnos de la importancia de la colaboración y la asociación para impulsar el impacto en el ámbito de la longevidad saludable, ojalá durante nuestra vida?

Andrew Scott: Creo que la longevidad es un tema de enorme importancia, a la altura de la inteligencia artificial y el cambio climático. Si pensamos individual y colectivamente, pocas cosas serán tan importantes para nuestro futuro como la forma en que envejecemos. Es algo obvio, ¿no? Pero cómo envejeceremos no es algo sencillo. Depende de muchos factores diferentes. Dependerá de los productos que compremos. Dependerá de lo que haga mi empleador. Dependerá del medio ambiente, de mi comunidad y de las normas sociales. Abarca muchas áreas diferentes. Creo que, ya se trate de individuos, comunidades o gobiernos, tenemos que centrarnos realmente en cómo apoyamos estas vidas que ahora son más largas. Eso requerirá muchos cambios muy tecnocráticos en la economía, el sector financiero y los sistemas de salud. Pero, sobre todo, es realmente una cuestión personal. Sabemos que las personas que viven más son las que tienen un sentido de propósito, de comunidad y de compromiso. Por eso, adaptarse a una vida más larga es, en cierto sentido, la actividad colaborativa por excelencia.


Publicado a las 16:11h in Editorial by estudiobajbujdiseno

La longevidad representa una excelente oportunidad para que las sociedades transformen la manera en que piensan sobre la vida, el trabajo y el propósito. Es lo que plantea el destacado economista y profesor de la London Business School, Andrew J. Scott, en su reciente libro “The Longevity Imperative”, donde se refiere a las implicaciones económicas, sociales y políticas de vivir más tiempo.

Sabemos que en los últimos 100 años, la esperanza de vida en el mundo ha aumentado en promedio entre 2 y 3 años por cada década, lo que desafía a los mayores a una “reinvención personal”, como destaca el profesor Scott.

Tres son las ideas centrales que quisiera relevar y que en Tálanton vemos como ejes fundamentales tanto para la definición de políticas públicas y empresariales, como también a nivel individual, considerando nuestra mirada de las personas mayores como sujetos activos de derecho:

La noción tradicional de que uno elige una carrera y se aferra a ella hasta la jubilación ya no corre. ¿Estamos como sociedad impulsando a las personas a reinventarse, diversificar sus carreras y desarrollar nuevos intereses a lo largo de sus vidas? ¿Cuál es el rol de las empresas en esto? La rápida evolución de la tecnología y el mercado laboral exige que los profesionales se actualicen constantemente. Al mismo tiempo, la tecnología fomenta un entorno propicio para la reinvención al dar acceso a una amplia gama de recursos en línea que permiten a los profesionales aprender y reeducarse sin grandes barreras. ¿Estamos diseñando políticas públicas que faciliten el acceso masivo a las herramientas tecnológicas que permiten el desarrollo de habilidades y competencias necesarias para la constante reinvención personal? La reinvención requiere un cambio de mentalidad, en el que las personas deben verse a sí mismas como aprendices de por vida. ¿Estamos promoviendo en nuestras familias, colegios, universidades y lugares de trabajo una actitud flexible y abierta al cambio, cuestionando las creencias tradicionales sobre el trabajo y la carrera profesional?

Los invito a plantear estas y otras tantas preguntas en nuestros ámbitos de influencia y a abrazar con optimismo y proactividad los desafíos y grandes oportunidades que plantea el fenómeno de la longevidad.

Alejandra Pérez Fabres, Presidenta de Corporación Tálanton






EnciclopediaRelacionalDinamica: AndrewjScott (última edición 2024-11-29 02:44:18 efectuada por MercedesJones)