ProgramaMiCasaUnaVidaEnComunidad
El proyecto ‘Mi Casa: una vida en comunidad’, liderado por Plena Inclusión España, consiste en establecer un nuevo modelo de cuidados para las personas con discapacidad que requieren más apoyos. Este modelo les permitirá elegir cómo y con quién vivir, y les brindará oportunidades para relacionarse con otras personas en sus pueblos y barrios.
Cluster SIVI, en colaboración con Plena Inclusión, ha trabajado en implantar diversas soluciones tecnológicas en las viviendas incluidas en este proyecto. Estas tecnologías promueven la autonomía de las personas con mayores necesidades de apoyo, gestionan sus actividades sociales y adaptan las viviendas a las circunstancias individuales de cada persona.
Durante el proyecto, más concretamente el 14 de mayo 2024, se celebró un seminario para difundir los primeros resultados de la aplicación de estas tecnologías. Durante el seminario presentamos algunas experiencias de uso y compartimos conclusiones y retos del informe de resultados:
Cuanto más se usa la tecnología, mayor es la sensación de control sobre la misma. Por tanto, es necesario dar tiempo a las personas para que se familiaricen con las tecnologías. Las personas que requieren menos apoyos muestran una mayor alfabetización digital. Las tecnologías tienen un mayor impacto en las personas de más edad. Ha aumentado la percepción positiva respecto a la ayuda que suponen las tecnologías para las personas con discapacidad. En aquellas viviendas donde se aplican más tecnologías, el aprendizaje ha sido mayor. Cuanto más tiempo se permite a las personas usar la tecnología, más aprenden a utilizarla. Los factores personales y los profesionales influyen en la experiencia de los usuarios con la tecnología. Existe una preferencia por herramientas de control del entorno y actividades básicas de la vida diaria. Los profesionales experimentan mayor complejidad en su tarea durante los primeros meses de aplicación de las tecnologías, aunque esta sensación disminuye con el tiempo. Se han identificado 68 tipos de soluciones tecnológicas diferentes. Las tecnologías de control de entorno, como Alexa, han sido valoradas como las más fáciles de usar. Existen percepciones diferentes entre los profesionales y las personas con discapacidad. Retos de futuro Es crucial profundizar en un enfoque más personalizado para la implementación de estas tecnologías. Debemos analizar el contexto y abordar el cambio de cultura organizacional que esto implica. Continuaremos probando nuevos usos de las tecnologías y retirándolas si no contribuyen a la mejora de la calidad de vida. Necesitamos espacios compartidos para reunir estas experiencias de uso y debatir sobre ellas.