LONGEVIDAD, ENCRUCIJADA HISTÓRICA

"Mas que en ningún otro momento de la historia, nos hallamos en una encrucijada. Un camino conduce a la desesperación absoluta, el otro a la destrucción total. Quiera Dios que tengamos la sabiduría de elegir correctamente." (Woody Allen)

Trataremos de explorar el territorio de la Longevidad con humor, curiosidad, entusiasmo y con una convicción: pese a los diagnósticos negativos, casi apocalípticos, sobre nuestra sociedad en general y en relación con la vejez en particular, existe la posibilidad de construir un paradigma social diferente. Una sociedad inclusiva para todas las edades. En el modelo actual la comunidad ve a las personas ancianas abrumadas por el paso de los años, con esquemas de soledad, sufrimiento, falta de comprensión, pobreza, poco nivel de acceso a una vida digna, rechazo o desconocimiento de la tecnología, aislamiento, falta de proyecto. Algunas personas mayores adhieren a ese modelo negativo y aceptan el paradigma del viejismo. Sin embargo, muchxs de nosotrxs -personas longevas que ya iniciamos el camino del envejecimiento- no pensamos habitualmente con una perspectiva poco esperanzadora, de hecho no nos identificamos con ellos[[perennials sentimos que somos PersonasPerennials. No tenemos la experiencia de que "viejxs, son lxs otrxs." No negamos la vejez propia ni recargamos la ajena. Sin embargo, y aunque resulte contradictorio, no nos sentimos viejos. ¿Cómo puede ser? Simplemente estamos viviendo otra experiencia de la vejez, estamos transitando un nuevo tipo de vejez que lenta y silenciosamente se despliega sin tomar protagonismo, casi sin entrar en la agenda de nadie.

Este nuevo modelo nos sugiere que podríamos lograr algo mejor que adherir al modelo negativo o positivo de la vejez, si nos concentramos en lo humano vital Si nuestras acciones de transformación empiezan por nosotros mismos. Cambiar nuestra manera de percibir la realidad modifica nuestro mundo. Si pensamos en la longevidad como un hecho diferente al mero durar, si pensamos que es un camino a explorar, es posible que nos transformemos en pioneros de una nueva realidad. En los temas de la vitalidad y la longevidad se necesitan exploradores, pioneros y colonos.

En estas páginas se registran reflexiones y acciones sobre la longevidad que tienen el valor de partir de la propia experiencia, de la propia necesidad. Al mismo tiempo, buscan ser una invitación para que otras personas se comprometan con aportar sus conocimientos, vivencias, tiempo y ganas de comprender y mejorar nuestra inteligencia colectiva respecto de la longevidad. Estas personas, para imaginar una longevidad requerida, no tienen porque ser mayores, ni longevos. Ni siquiera tienen que ser adultos. Podemos proponernos una aventura juntos. Una exploración creativa sobre el tema de la vitalidad que se requiere para ser longevo, exploración en la que participen y se comprometan varias generaciones.

Lo que resulta cierto es que existe una necesidad -cada vez más intensa- de encarar estos temas. Al mismo tiempo, existe la oportunidad de una búsqueda de alternativas, de imaginar cambios en las funciones y en nuestros vínculos como personas (adultas-mayores, jóvenes, niños). Creemos en nuestras posibilidades reales de transformación a partir de modificar las propias representaciones sobre la vejez. Nos proponemos mostrar la diversidad de vejeces que existen y poner el eje en la longevidad. Relevar el “estado del arte”, de las representaciones sociales, de los mitos, de los paradigmas, de los relatos, de los procesos que en la vida cotidiana personas concretas tienen que enfrentar cuando logran, en un acto supremo de sabiduría, vivir más que los otros.

El aumento de la longevidad es una experiencia individual, familiar, comunitaria, social y global. De esta manera, es responsabilidad de todxs.

En nuestra sociedad ¿Qué les pasa a aquellas personas que son longevas? ¿Cómo viven la idea de un futuro de longevidad aquellas personas cuyos padres y familiares vivieron (están viviendo) 90, 95, 100 años y más? La población argentina de adultos mayores, en el CENSO 2010, muestra que ya hay 3487 personas de más de 100 años. ¿Qué nos pasa a nosotrxs con esta información?

Comienza a aparecer, entonces, toda una generación de "pioneros del tiempo". Son pioneros porque la humanidad tiene pocas experiencias de personas tan longevas como hay hoy. Ellas son pioneras en un territorio apenas explorado porque se está construyendo mientras se camina. Un territorio que hay con construir: una vejez sana. La vejez plena, vital y útil es un territorio conocido por pocxs.

Pero, tenemos que visibilizarlo. Hacer el mapa es algo posible, es una meta a alcanzar. Hay más preguntas que respuestas. Lo importante es que aquellas personas que nos sentimos jóvenes pero estamos en edad de pensar en la jubilación nos encontramos en una encrucijada. Aquellos que tenemos padres que están en la cuarta edad (85-95 y más) reforzamos la perspectiva de Allen, al admitir que envejecer es la única alternativa a la muerte o como dice un autor español "envejecer es bueno para la salud". En la actualidad la situación muestra:

// Todos estos puntos se potencian y retroalimentan, pero se puede hacer algo que corte con el dilema planteado por Allen.

Una ciudad se puede convertir en un ejemplo de comunidad para todas las edades,en un modelo de cambio cultural ¿Conocemos algún caso concreto? Contestar a merjones@gmail.com

EnciclopediaRelacionalDinamica: LongevidadEncrucijadaHistorica (última edición 2018-12-03 20:02:36 efectuada por MercedesJones)