Rebecca Solnit


A Rebecca Solnit los hombres le explican cosas (y no le hace falta) Elizabeth Casillas https://www.revistacactus.com/a-rebecca-solnit-los-hombres-le-explican-cosas-y-no-le-hace-falta/

En una fiesta del verano de 2003, a Rebecca Solnit un señor le preguntó de qué iba su último libro. Cuando ella comenzó a explicárselo, él le interrumpió para hablarle de otro libro que trataba el mismo tema y que, a todas luces, sería mucho más importante. En realidad, este señor estaba describiendo el argumento de River of Shadows: Edward Muybridge and the Technological Wild West, el ensayo que Solnit acababa de publicar –y que estaba recibiendo el beneplácito de la crítica cultural– sobre la aniquilación del tiempo y el espacio y la industrialización de la vida cotidiana. Esta anécdota dio pie a un pequeño ensayo que, junto a ocho más, ahora publica Capitan Swing bajo el título Los hombres me explican cosas, en el que Solnit entreteje toda una serie de ideas sobre la persistente desigualdad entre mujeres y hombres y la violencia basada en el género.

En 2010, el New York Times selección el término mansplaining como una de las palabras del año. En 2014, el Oxford Dictionaries lo añadió a su versión online. Este término que conjuga man («hombre») y explaining («explicar») alude, precisamente, a ese fenómeno que se da cuando un hombre explica algo a una mujer de una forma condescendiente, independientemente de si ella sabe más del tema que él. «Durante aquella temporada –tras la publicación de Wanderlust, en 2000– en dos ocasiones recriminé el comportamiento de un hombre, sólo para que se me dijeran que las cosas no habían sucedido para nada tal y como yo las contaba, que estaba siendo subjetiva, que deliraba, estaba alterada, era deshonesta; en resumen: era mujer», relata Solnit. A ella, el tener respaldo público como escritora le ayudó a permanecer en su lugar y no dudar de sí misma y retroceder. Ahora, saber que este fenómeno tiene un nombre y que puede ser denunciado públicamente puede ayudar a millones de mujeres que no se sentían respaldadas.

«La violencia doméstica, el mansplaining, la cultura de la violación y el derecho sexual están entre las herramientas lingüísticas que redefinen el mundo con el que muchas mujeres se encuentran cotidianamente y abren el camino para comenzar a cambiarlo» Que los hombres nos expliquen cosas no es más que otro síntoma de una sociedad enferma en la que se repiten frases como «calladita estás más guapa» o «vete a fregar» cuando una mujer da su opinión o se adentra en un territorio hasta ahora ocupado mayoritariamente por hombres. Ejemplo claro sería el tristemente famoso #GamerGate que, además, sirve como muestra de otro de los apuntes de Solnit: Twitter es el medio favorito para enviar amenazas de violación y de muerte a mujeres que se atreven a hablar. «Como señala Astra Taylor en su nuevo libro The People’s Plataform, el discurso de la libertad de opinión es utilizado para proteger el discurso del odio, es en sí mismo un intento de privar a otros de su libertad de habla, para atemorizarlos en el silencio», precisa.

Let's me explain

A las tentativas que directamente suponen una amenaza contra la integridad física de las mujeres –y aquí podemos englobar la violencia doméstica o la cultura de la violación–, también pueden sumarse otras pretensiones más sutiles sobre las que Solnit reflexiona en el libro. Por ejemplo, la autora habla del síndrome de Casandra, que mucho tiene que ver con todas esas veces en que a las mujeres se nos ha tachado de histéricas o locas. Casandra tenía el don de la profecía pero, al rechazar a Apolo, éste la maldijo con que nadie la creería. ​También piensa mucho en la obliteración o, más bien, en el hecho de que la obliteración siga siendo visible. Y a estas influencias excluidas las llama las abuelas porque, repasando árboles genealógicos, muchas veces se encontraba con que las mujeres habían sido borradas u omitidas.

«El objetivo del ensayo nunca fue decir que creo estar notablemente oprimida, sino el hecho de que este tipo de conversaciones son la cuña que abre el espacio a los hombres y a la vez lo limita a las mujeres» Es fascinante la mordacidad y el talento para la reflexión de Solnit, capaz de evidenciar cómo un caso de escándalo, el de Strauss-Kahn, puede ser una muestra más de la injusticia global. «El presunto agresor y la víctima son un reflejo de relaciones de mayor envergadura en todo el mundo, comenzando con la agresión del FMI a los pobres. Esa agresión es parte de la gran lucha de clases de nuestra era, en la que los ricos, y sus representantes en los Gobiernos, han tratado de engrandecer sus propiedades a expensas del resto de nosotros», señala.

Pero su mensaje, más allá de ser apocalíptico, es esperanzador. «El cambio en la conversación es alentador, como también lo es el creciente compromiso de los hombres con el feminismo», añade. Los hombres me explican cosas tiene visos de convertirse en una lectura obligatoria para todo aquel que quiera profundizar en la desigualdad entre mujeres y hombres, la violencia basada en el género y los nuevos feminismo.


EnciclopediaRelacionalDinamica: RebeccaSolnit (última edición 2021-03-28 22:22:44 efectuada por MercedesJones)