Longevidad Vinculos, la sociología de las relaciones o SociologiaRelacional




POLIAMOR Y OTRAS RELACIONES




LA IMPORTANCIA DE LOS VÍNCULOS PARA LA LONGEVIDAD POSITIVA ESTÁ VERIFICADA POR LA CIENCIA



Las concepciones post-románticas del amor: Gibbens y Bauman

AMOR ROMÁNTICO, AMOR CONFLUENTE Y AMOR LÍQUIDO

AMOR ROMÁNTICO



El poliamor en tiempos de COVID Por Mariángeles Castro Sánchez, Directora de la Licenciatura en Orientación Familiar de la Universidad Austral. https://www.unidiversidad.com.ar/el-poliamor-en-tiempos-de-covid




AMA Y HAZ LO QUE QUIERAS-

LECTURA DE LA FRASE


CLAUDIA CAMPOS- charla zoom, agosto 2022, Bs As yo ella en el campo de una amiga.



AMOR

Explicaciones sociológicas de la sobrevaloración del Amor Romántico- Understanding love. Sociological explanations of the overvaluation of Romantic Love Olaya García Vázquez- 2018

cual no significa que se olvide la responsabilidad individual que tenemos en las relaciones interpersonales.

complementario (la media naranja), vivir en una simbiosis que se establece cuando los individuos se comportan como si de verdad tuviesen necesidad uno del otro para respirar y moverse, formando así, entre ambos, un todo indisoluble. (Sampedro, 2005)

EL AMOR LÍQUIDO


teoría del amor romantico en sociología SEGUIR EXPLORANDO

http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0121-47722013000100004


VÍNCULOS DE PAREJA LA VIUDEZ


LAS RELACIONES VERTICALES Y HORIZONTALES


Así que ahí vamos: en el reverso de la misma moneda del boom de la IA hay un proceso de "súper-humanización" con muchísimas aristas. Contra todos los pronósticos de metaverso (supuestamente para esta fecha íbamos a estar todos con cascos inmersivos en nuestras realidades paralelas), la gente busca cada vez más el cara a cara y las experiencias reales. Nunca se viajó tanto, a pesar de que los pasajes, hoteles y el turismo en general cuestan el doble que antes de la pandemia. La última inversión de Netflix no tiene que ver con contenidos para pantallas, sino con instalaciones reales para experimentar experiencias en vivo. Y así podríamos seguir enumerando casos.

Uno de los ejemplos más llamativos de esta tendencia tiene que ver con otro fenómeno contra-intuitivo: el de la caída del mercado de las citas on line (tipo Tinder). En una de las escenas más graciosas de la primera temporada de la serie romántica “Envidiosa”, la protagonista (Victoria, Griselda Siciliani) le pide ayuda a su amigo Matías (Esteban Lamothe) porque suponía que estaba haciendo algo mal con la aplicación de citas que se había bajado. No entendía dónde estaban los candidatos razonables, porque todos los que le aparecían eran rarísimos. “Vicky, tenés que entender que las aplicaciones de citas son como un outlet”, le explica Matías, “si alguien está ahí, es porque alguna falla tiene. Pero como en los outlets, si revolvés mucho podés encontrar algo decente”.

Vuelta a la realidad: la escena capta un fenómeno extendido en la “economía de las aplicaciones de citas on line”, de retracción, fatiga y hasta fuertes críticas desde algunos sectores a una modalidad que parece haber tenido su pico hace cinco años, pero cuyo uso empezó a estancarse y con ello los valores de las empresas del rubro (que alguna vez fueron las cenicientas del mundo de start ups). En el extremo, hay analistas que hablan del “apocalipsis del online dating” y de una vuelta al histórico: ¿No tenés alguien para presentarme?; y a un cara a cara bajo el cual también empiezan a florecer otros modelos de negocios.

Si “Envidiosa” se hubiera filmado hace cinco años, en 2020, probablemente la escena de las citas pactadas en una aplicación digital hubiera tenido otro color. Es que ese año se tocó el pico para este negocio y modalidad, con 287 millones de usuarios activos en todo el mundo, de acuerdo a un reporte citado por The Economist. En 2023, el número global cayó a 237 millones, con varias empresas icónicas del rubro perdiendo hasta dos tercios de su valor desde entonces y con enormes problemas para monetizar el modelo de negocios.

Kyla Scanlon, una creadora de contenido sobre finanzas que escribió “¿Is this economy?”, publicó meses atrás un análisis muy extenso y lleno de ideas sobre este tema, titulado “Cómo las apps de citas contribuyen a la crisis demográfica: las consecuencias de monetizar el amor”.

En sus inicios, la promesa de este modelo parecía convincente: liberarse de los límites marcados por la geografía o el círculo social cercano y encontrar una pareja con intereses y preferencias más asociados con los propios. Pero, por distintos motivos, esta dinámica en promedio no está funcionando: un 75% de las personas solteras en EE.UU. afirman que no están satisfechas con sus citas; y un porcentaje cada vez más alto revela que “se rindió” y salió de este mercado.

Netflix planea abrir lugares físicos para experiencias reales en 25 ciudades de EE.UU. entre 2025 y 2026, con más de 50 experiencias inmersivas. El formato se llama "Netflix House".

Un estudio muy extenso de Pew Research al respecto para 2024 informa que un tercio de las personas reportaron malas experiencias en este campo, una proporción similar contó que gente con la que salía dejó de golpe de contestarle mensajes sin explicación y más de la mitad de las mujeres tuvieron algún grado de situación de acoso (apuro para tener relaciones, recibir fotos explícitas sin consentimiento, etc). La grieta y la polarización hicieron lo suyo: “Haber votado a Trump” es en la mayor economía del mundo un motivo más citado para rechazar un candidato o candidata que su situación económica o la diferencia educativa.

¿Qué sucede con este panorama en la Argentina? “Acá se ve exactamente lo mismo: Tal vez no hay abandono total de los perfiles de citas pero sí muchos mensajes de ‘qué tal, qué hacés perdidas’, vínculos muy lábiles, presencias que no llegan a ser vínculos reales, contactos muy transaccionales, entonces hay una caída, una fatiga y cierto hartazgo; mucha gente que decide desinstalarlas porque se da cuenta de que es más la ansiedad y desilusión que generan que el beneficio real”, me contó Ximena Díaz Alarcón, que hizo estudios sobre el tema a nivel local y en otros países de Latinoamérica. “Es una paradoja porque se suponía que la tecnología iba a ayudar a resolver estos desajustes, pero esto no se dio así, entonces se volvió más al ‘¿tenés un amigo para presentarme?’ o a las formas más tradicionales de conocer gente: en el trabajo, en la facultad, etc”, agregó.

El mercado se adapta rápido, y con los cambios culturales comienzan a surgir alternativas que tienen en cuenta el nuevo escenario. Tamara Tenenbaum, escritora, filósofa y autora de varios best sellers, es una experta en analizar este tema. Escribió, entre otros libros, “El Fin del Amor” (luego el guión de la serie) y actualmente está puliendo una comedia romántica en la que los protagonistas hablan sobre citas que tuvieron. “Hay una cantidad enorme de nuevas posibilidades de encuentros presenciales que llaman a ‘matchear’ cara a cara, sin las presiones de las apps tradicionales, y que están teniendo éxito entre las generaciones más jóvenes”, me contó la autora cuando la consulté para una nota en La Nación.

Algunas apps de citas como Happn comenzaron a organizar encuentros offline –fiestas, citas de juegos, cenas– en un intento por adaptarse a las nuevas tendencias sociales. La app Timeleft busca generar “matches” entre personas con intereses en común y los invita a un encuentro presencial en un restaurante. Hay una diferencia: la cita no es “de a dos”. Al usuario lo espera una mesa larga con personas que Timeleft considera compatibles.

La historia de las aplicaciones de citas se inició en 1995 en los Estados Unidos con Match.com, que luego en 2012 compró a su principal competidor, OK Cupid. Para esa época, con el auge de los teléfonos inteligentes, las citas on line rompieron su viejo estigma y crecieron de manera exponencial, con varios start ups que se volvieron unicornios, como Tinder, Grindr, Hinge y Bumble.

Cuando Match se separó de su compañía original, IAC, en 2020, su valor de mercado era de 30 mil millones de dólares. Hoy vale menos de un tercio. Hay inversores que perdieron la paciencia y ya no alientan a crecer a cualquier costo, sino que piden mucho más foco en los márgenes de ganancias.

Esto es un problema grande, afirma Scanlon, porque el incentivo de estas plataformas está alineado con que alguien busque eternamente pareja (y pague una suscripción Premium). En definitiva, la renta está asociada directamente a la inhabilidad de los usuarios para encontrar su verdadero amor. No hay “matcheo” entre la esencia del modelo de negocios y los clientes, que prefieren volver a alternativas menos algorítmicas para conocer su pareja.


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EnciclopediaRelacionalDinamica: LongevidadVinculos (última edición 2025-07-24 10:33:11 efectuada por MercedesJones)